Otra vez por acá con más malas noticias para mí y mi familia, después de casi 13 años de hermosa compañía, mi hijito, mi negrito lindo ya está descasando, tuve que hacerlo dormir porque ya estaba sufriendo una decisión totalmente difícil y que no me gustaría volver a pasar.Cuando era pequeña tuvimos un perro que era nuestro cómplice en nuestras travesuras; pero luego un día enfermo y bueno no se pudo hacer mucho por él, su enfermedad estaba muy avanzada y justo el día que lo iban hacer dormir diosito vino por él.
Yo esperaba que esta vez sucediera lo mismo, que mi lindo bebe no sufriera más, pero me di cuenta de que algunas decisiones no se toman solamente con el corazón si no con la razón, una mala combinación porque no me gusto el resultado y aún me cuesta trabajo, mi bebe ya no está aquí conmigo, sé que ya no sufre pero no me acostumbro, me hace falta. Recuerdo cuando lo traje por primera vez entraba en mi bolsillo de la blusa de colegio, lo traje apenas de un mes, se suponía que tenía otro destino pero al final me lo quede, como todo buen bebe por las madrugadas lloraba mucho y yo como buena madre le calentaba su leche y lo hacía dormir y cada q podía lo subía a dormir conmigo, parecía una esponjita y daba risa con la panzota que tenía después de comer, mi hijito lindo, a medida q iba creciendo se volvió un poquitín renegón pero eso era propio de su raza, además era su forma de cuidarnos, sobre todo a mi mamá que la seguía por todos lados. Por la noches siempre que se quedaba dormido en el cuarto de mamá lo subía como un bebe hasta mi cuarto porque desde que se puso malito empezamos a compartir el cuarto otra vez, las que me hacía pasar xq los primeros días no respetaba el cuarto y hacia sus necesidades, después fue aprendiendo y me pasaba la voz para q le habrá la puerta y salía corriendo, pero como han de suponer era por las madrugadas así q media despierta y media dormirá le abría la puerta, después me hacía roche como se había acostumbrado a dormir conmigo cuando me iba de tono, no dormía se la pasaba llorando y al día siguiente se ponía malito que cargo de conciencia no, hay mi perrito como lo extraño, me hacia reír mucho y me gustaba apretarlo mucho, le tenía miedo al agua en la nariz, y ultimo parecía un niñito se acerba y como si te piñizcara con sus dientecitos venia y te mordía, daba cosquillas. Ahora quisiera ser como los niños que superan rápido sus tristezas, pero cuando uno es grande es más difícil y los recuerdos vienen a ti constantemente y más cuando quieres tanto a tu mascota que en realidad es un miembro mas de tu familia, pero no tengo de otra verdad ? tengo que continuar y sentirme feliz xq como dice mi hermano el está ahora en el cielo de los perros jugando y muy feliz. Te quiero mucho mi bebe lindo.
You’ll be with me wherever I go
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